jueves, 4 de mayo de 2017

Burócrata Vs empleado en el sector privado en México

Una empresa privada tiene un trabajador por cada cuatro burócratas que tiene una empresa paraestatal de las mismas proporciones.
Un burócrata gana en salario tres veces mas que el mismo trabajador en una empresa privada.
Un burócrata recibe cuando menos otro 25% al de su salario en estímulos, bonos y prestasiones extraordinarias, llegando a ser hasta cuatro veces mas para los burócratas en la Cámara Legislativa.
Eso sin contar la ganancia en corrupción que pudiera haber en trámites realizados por algún burócrata corrupto.
México tiene 10 veces mas burócratas que EEUU por habitante (aunque habría que decir que EEUU casi no tiene empresas paraestatales como PEMEX, CFE, IMSS, SEP, etc).
Ejemplo práctico.
Usted está construyendo su casa, normalita de unos 150 metros cuadrados de construcción, para ello, y como tiene el capital y le urge, contrata tres maestros albañiles y tres ayudantes.
Entonces llega el sindicato y le exije que debe tener contratados a 24 trabajadores, para entonces cobrarles cuota a 24 sindicalizados en lugar de a seis, tolerado por un líder político que apoya al líder sindical, siempre que eso se traduzca en votos para él mismo.
Luego exije que los trabajadores ganen el triple, y también exije premios, becas, apoyos y estímulos.
Dado que se debe mantener ocupado al trabajador en algo, el sindicato no tolera que se utilizen herramientas modernas, así que prohibe el concreto premezclado y exije que se bata la mezcla para la losa en el suelo con pala y pico, prohibe la cortadora de varilla y pide que se siga cortando con arco y segueta, y así por consiguiente; dado que el trabajador así se ocupa piensa que se ganó su salario, aunque se haya perdido productividad y competitividad.
Como los trabajadores reciben todos esos beneficios, adoran a su líder sindical, le toleran si transa o abusa de ellos mismos, o si impide que exista democracia en el sindicato.
Luego votan por el partido político que se prestó a acceder a semejantes conquistas laborales, o prometa mantenerlas, y el político con tal de ganar elecciones lo permite aunque se lleve entre las patas a todos los demás.
Bueno, al final evidentemente el resultado es que no logró usted echar ni siquiera la primera loza y se acabó todo su dinero, aparte de que como utilizó herramientas antiguas, el trabajo no quedó con acabado profesional sino medio hechizo.
Pero en una empresa paraestatal es diferente.
Si la empresa paraestatal se acaba el dinero y no acaba el trabajo, pues a echar mano de los impuestos que pagan los demás, o a echar mano de deuda.
Cuando el petróleo está caro, pues como es tan buen negocio de allí se puede tomar para mantener esos privilegios.
Pero eso también tiene un límite, porque cíclicamente el petróleo suele desplomarse, y a la larga, o quiebran esas empresas o quiebran al país.
Además que como casi siempre las empresas paraestatales son un monopolio, no es su prioridad dar un buen servicio porque el consumidor está preso y no puede optar por otro servidor.
Sólo hay que revisar la historia con Luis Echeverría Alvarez, José López Portillo, Carlos Salinas de Gortari, y mas recientemente en otros países como Grecia o Venedzuela.
Si, la corrupción también nos afecta, y mucho, pero si comprende los inmensos costos de la mano de obra en el ejemplo que puse de la construcción de una casa, rápidamente hará conciencia de que el costo de la burocrácia en México es probable que sobrepase el costo o pérdida por la corrupción.
Pero es que además, sí hay corrupción, puesto que el líder sindical se hace de la vista gorda si acaso el funcionario que gerencia la empresa paraestatal desvía recursos, eso a cambio de que el funcionario se haga de la vista gorda si el líder sindical abusa de sus sindicalizados.
Esto no propone corregirlo Andrés Manuel López Obrador, hasta ahora no lo hizo Vicente Fox ni Felipe Calderón, tampoco he oído que proponga corregirlo Margarita Zavala Gómez Del Campo, y por supuesto que no lo correjirá el candidato del PRI.